Como consecuencia de los fatídicos atentados acontecidos el pasado viernes 13 de noviembre en París, que se cobraron la vida de 132 personas, causando más de 350 heridos, la República Francesa con Francois Hollande a la cabeza, convocó un Consejo Extraordinario de Ministros para desarrollar un plan de medidas cautelares y disuasorias en respuesta al ataque terrorista atribuido al DAESH.
El presidente Francés anunciaba este lunes más ataques sobre el territorio Sirio y los centros logísticos del Estado Islámico como Raqqat, al mismo tiempo que comunicaba la implementación de severas medidas de seguridad destinadas a combatir el terrorismo. Hollande protagonizó duras críticas contra los yihadistas exponiendo que la solución no es la contención sino la destrucción de la organización. Respecto a los atentados manifiesta que estos fueron planificados en Siria, organizados en Bélgica y perpetrados en el territorio Francés. Francia se declara en guerra contra Siria y extiende el Estado de emergencia a 3 meses al mismo tiempo que proclama una posible reforma constitucional para dar un mayor poder y capacidad de acción a los cuerpos y fuerzas de seguridad.
En lo que respecta al ámbito de política interior, se anunciaba una batería de medidas excepcionales entre las que se destacan el cierre temporal de las fronteras y la negativa de acoger a más refugiados, la retirada de la nacionalidad francesa a aquellas personas con doble pasaporte implicadas en actividades terroristas, la eliminación de ciertas trabas al uso de armas de fuego por parte de la policía, el incremento de la práctica de registro e intervenciones sin la necesidad de la tutela judicial o llevar a cabo el cierre de mezquitas donde se haga apología del terrorismo.
Del mismo modo también se establece una nueva reglamentación que se aplicará a los ciudadanos franceses que acudan a combatir a Siria, los cuales, podrán ser encarcelados de forma automática y privados de su nacionalidad.
En palabras de Hollande: “Se gastará lo que haga falta para elevar la seguridad francesa”. A las medidas anteriormente mencionadas se les ha sumado la ampliación del presupuesto de defensa, la contratación de 5.000 nuevos policías y la creación de 2.500 nuevos puestos para funcionarios públicos en prisiones y juzgados. Consecuencia del despliegue de operaciones policiales este fin de semana, se ha llevado a cabo 168 registros, 23 arrestos y 31 armas incautadas, información que ha sido otorgada por el Ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve.
Las medidas han ido acompañadas por la consternación del pueblo francés ante la barbarie terrorista, sin embargo han marchado con firmeza al son de la marsellesa y arropados por la bandera tricolor y gran parte de la comunidad internacional.
La actuación del gobierno Galo nos recuerda a las medidas tomadas por George Bush de cara a los atentados del 11 de setiembre del 2001. La destrucción de grupos terroristas se ha vuelto un menester y un objetivo esencial para la política de Hollande, ahora más que nunca. Por consiguiente, Francia intentará a su vez que países como Rusia y Estados Unidos, se unan para hacer frente a la amenaza del terrorismo.
Es importante destacar también que todas las propuestas por parte del gobierno galo generarán un aumento del déficit presupuestario. Sin embargo, constituye una medida de carácter imprescindible según Hollande, que le da prioridad a la seguridad frente a la estabilidad del país. El gobierno Francés se encuentra en una delicada situación a un año de las elecciones presidenciales y bajo la constante presión por parte de la oposición de endurecer las medidas contra el terrorismo.
Dexter Vidal, Paola Ramírez, Diana Cerviño, Pelayo Suarez