El resultado de las elecciones regionales andaluzas celebradas el pasado 2 de Diciembre ha cambiado el panorama político nacional, suponiendo un gran terremoto para los andaluces socialistas y la población española en general, transformando el equilibrio de las fuerzas políticas tradicionales que se habían dado hasta el momento. Las últimas elecciones andaluzas han sido las primeras para el gobierno de Pedro Sánchez, seis meses después de su inesperada llegada a la presidencia tras la moción de censura que acababa con el gobierno popular de Mariano Rajoy.
Los resultados han sido inesperados para todos, desarrollándose en un momento crítico, finalizando con un desastroso resultado para el PSOE, un partido con una gran trayectoria y apoyos en la comunidad autónoma, después de 36 años ininterrumpidos de gobierno socialista. La avalancha de populismos unido al auge de los extremos, algo nunca visto antes en España, ha hecho posible que Vox se convierta en el quinto partido nacional y una opción para los ciudadanos andaluces.
Aunque los socialistas de Susana Díaz se han alzado como los grandes vencedores de la noche, lo han hecho con una pérdida histórica de votos, de los cuales muchos de ellos han ido a parar al nuevo partido Vox, un hecho inesperado tanto para España como para Europa. Recordemos que ya son varios los países europeos donde han aflorado populismos entre la sociedad, como ha sido en el caso de Alemania, Francia, o Gran Bretaña, algo a lo que se han unido también nuestros vecinos los estadounidenses con la llegada del fenómeno Trump.
Susana Díaz Pacheco, Secretaria General de la federación andaluza del PSOE y presidenta de la Junta de Andalucía está tratando de mantener la unidad en su partido a pesar de la pérdida de apoyos en el Parlamento Andaluz y el surgimiento del Partido VOX. Con una gran trayectoria profesional en el ámbito político, llegó a la presidencia del PSOE en 2013, obteniendo en 2017 el cargo de Secretaria General del partido. En los próximos meses tendrá que hacer frente a los desafíos que estos cambios suponen para su partido.
A pesar que el PSOE ha ganado nuevamente en Andalucía las elecciones, se ha vivido un giro histórico inesperado, pudiendolo definir como una caída del socialismo después de estar al más de 30 años sin alguna interrupción al frente del Parlamento. Con este resultado, por primera vez en toda la historia de Andalucía el PSOE le ha dejado el camino abierto al Partido VOX de inclinación derechista, y con ello la posible dimisión de Susana Díaz.
Los resultados recogidos han causado grandes estragos en el rol que tenía el PSOE en la población Andaluza, ya que son 14 escaños los que han perdido, siendo un triunfo muy consternado y nada favorable para Susana Díaz, ya que nunca imaginaron que VOX siendo un partido de Ultraderecha pudiera tener algún lugar en el parlamento y no solo que obtuvieron una baja cantidad de escaños, sino que pudieran obtener 12 escaños, las consecuencias logradas hacia el PSOE han sido la nula probabilidad que Susana pueda repetir gobierno.
Al interior del PSOE apuntan que esta derrota fue a la demasía confianza y tranquilidad de Susana Díaz junto con su equipo de trabajo quienes no contaban con una buena estrategia, a pesar que las elecciones fueron adelantadas por Susana Díaz con el supuesto argumento que con ello podría mantenerse en el poder consiguiendo el triunfo, pero ni con las elecciones adelantadas a su favor ha conseguido su objetivo. Por tal motivo estos resultados los definimos como el hastío que ha vivido la sociedad Andaluza al frente del PSOE y las gestiones que ha dejado Susana Díaz.
La desmovilización del electorado de izquierdas y la clara subida de los votantes de derechas ha conmocionado a los socialistas, en el poder desde la transición española. Los socialistas andaluces no están nada tranquilos, se encuentran en un limbo de incertidumbre que podría perjudicarles considerablemente en un futuro no muy lejano. No se esperaban para nada la fuerte subida al poder del Partido VOX, al que las encuestas estimaba que ganaría 7 escaños menos de los que ha obtenido finalmente.
Este gran golpe para Susana Díaz supone un peligro declive socialista en Andalucía. La pérdida de poder para el PSOE unido al auge del nuevo Partido de VOX supone una de las mayores crisis para el partido socialista. Pedro Sánchez, ahora más que nunca debe volcar sus esfuerzos en restablecer el equilibrio político modificado por la extrema derecha si quiere seguir manteniendo la posición que históricamente ha mantenido en Andalucía.
3 de diciembre del 2018
Laura Cañibano Ponce de León
Alejandra Hernández Hernández
Reuben Kessler