Los ciudadanos europeos elegirán a los 705 eurodiputados que les representarán durante los próximos cinco años en Bruselas (Bélgica) y Estrasburgo (Francia) el próximo 26 de mayo, siendo el Brexit el tema principal sobre el que se perfilen las elecciones europeas. Sin embargo, otro de los temas importantes que sin duda influirá en las elecciones será el auge de la extrema derecha a lo largo de toda la Eurozona durante los últimos años.
En algunos países son fruto de la crisis de la deuda, los refugiados y la islamofobia, partidos populistas y euroescépticos; en otros son fuerzas establecidas con un carácter radicalmente conservador y nacionalista; y en otros son simplemente neonazis y violentos. Por otra parte, en algunos estados son voces minoritarias de la oposición, en otros gobiernan en solitario y con mayoría absoluta y en otros ocupan gran parte de la agenda política a pesar de no tener presencia parlamentaria.
Países como Austria, Alemania, Francia, Holanda, Polonia y Grecia son en los que más se hace notar la efervescencia ultraderechista, pero sin lugar a dudas es Hungría donde su presencia es más notoria, con el primer ministro Viktor Orbán como gran referente. Allí su bloque político Fidesz-KPND, de carácter conservador, anti-inmigración, euroescéptico y nacionalista, obtuvo en las parlamentarias de 2014 el 44,8% de los votos.
En nuestro país, Vox ocupa el puesto de este auge de la extrema derecha. El partido que lidera Abascal ya indicó que de momento no plantea integrarse en ningún grupo del arco parlamentario de la UE y que sería según las políticas y las leyes las que decantarían su posicionamiento en las votaciones. Además, busca que la UE defienda sus fronteras y sus raíces cristianas y que se oponga al multiculturalismo y a la inmigración masiva.
Sin embargo, en España es difícil que el ciudadano vote por un partido como Vox para las elecciones europeas, ya que los populares lo ubican en formaciones como el ECR porque más a la derecha, destacan, estaría ya Le Pen y no ven a Vox ni en el grupo liberal ni en el socialismo ni en el comunismo.
