La tensión en Venezuela sigue aumentando día tras día, y más aún por la noticia filtrada por un periodista exiliado en EEUU en la que informaba de la muerte del opositor al régimen Leopoldo López (Voluntad Popular). La información corrió como la tinta causando la preocupación de una Lillian Tintori, esposa de López, que acudió a la cárcel junto a su familia y simpatizantes del encarcelado en busca de respuestas. Las instituciones gubernamentales aclararon que el rumor era falso e infundado y que Leopoldo López estaba en buen estado, tal y como luego corroboró mediante un video desde su celda.
El presidente del país, Nicolás Maduro (PSUV), ha manifestado su intención de reconstituir, hoy día 9 de Mayo, una asamblea constituyente militar a fin de reforzar la Fuerza Armada venezolana, compuesta por el Ejercito, la Aviación, la Armada y la Guardia Nacional (policía militarizada). Un contundente refuerzo a las medidas que el Gobierno del país había iniciado, anteriormente, juzgando a civiles en tribunales militares, civiles acusados de participar activamente en protestas violentas e inconstitucionales que atentan al sistema democrático establecido en la actualidad. Son casi 300 los detenidos puestos a disposición de los jueces y fiscales militares que componen el aparato jurídico del país, dándose el caso de que al menos 40 ya fueron juzgados en un destacamento militar, acusados de instigación a la rebelión y delitos por ataque al centinela.
La reacción de la oposición no se hizo esperar y fue feroz y contundente. Julio Borges, diputado de la Asamblea Nacional, tildó como “aniquiladora para la democracia”, la medida de Maduro, al tiempo que apeló al espíritu de las Fuerzas Armadas silenciadas por unas Fuerzas Armadas sectarias a los intereses del pueblo. Mientras que el presidente de dicha cámara llamó a rebelarse contra la peor crisis, a todos los niveles, que el pueblo venezolano ha sufrido en años. “La lucha apenas comienza, seguiremos en la calle hasta lograr el cambio definitivo por el voto”. Estos juicios tan criticados por la oposición han causado diversas revueltas en diferentes estados del territorio nacional.
La ciudad venezolana Villa del Rosario (Estado de Zulia), se ha convertido en el epicentro de las protestas dándose la situación de que la estatua en honor al difunto Hugo Chavez ha sido destrozada. La respuesta del gobierno fue muy contundente cuando Diosdado Cabello, uno de los hombres con más poder dentro de la cerrada cúpula de Maduro, ridiculizó a los opositores que seguían apoyando a un López que “está en su cueva, metido, como debe ser los próximos 13 años”.
Estados Unidos, se unió a las protestas de la oposición, contestando también a las duras criticas que Nicolás Maduro dirigió al recién nombrado Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, a quien tildó de “extremista”. La administración republicana anunció “su profunda preocupación sobre motivaciones para Constituyente, que ignora voluntad del pueblo y erosiona aún más la democracia”.
Samuel Bosch y Miguel Val