Para poder comprender el conflicto que se está produciendo en Francia, debemos definir el movimiento de los chalecos amarillos, qué son y qué quieren conseguir.
Según un artículo publicado por el periódico ABC el 3 de Diciembre de 2018, se define a los chalecos amarillos como un grupo de hombres y mujeres, sin líder ni representante, de diferente procedencia y sensibilidad, con la intención de dar voz a la clase obrera en París y alrededores.
Las principales recriminaciones de este grupo van dirigidas hacia el presidente francés Emmanuel Macron, al cual se le recrimina por actuar de manera discriminatoria a favor de los más adinerados, mientras que las clases más bajas sufren estas acciones del presidente.
Es por ello que los chalecos amarillos cuentan con el apoyo de familiares y pensionistas tanto de París como de los pueblos alrededores, con grupos de jóvenes encapuchados tanto de extrema derecha como de izquierda, pero con el mismo objetivo, atacando a las Compañías Republicanas de Seguridad.
En el artículo del ABC aparecen los principales objetivos de estas manifestaciones, las cuales son:
- Evitar que sigan subiendo los precios de los carburantes.
- Recuperar el poder adquisitivo de las actuales clases medias y bajas.
- Recuperar los servicios públicos en las ciudades y pueblos de la periferia de Francia.
El movimiento ha destacado por su influencia a través de las redes sociales, sin seguir ningún orden ni organización, sino a través de reuniones de los ciudadanos insatisfechos por los nuevos medios de comunicación tecnológica.
En el periódico de El País se menciona el fracaso de la globalización, que en lugar de conseguir una cohesión de los ciudadanos ha provocado un distanciamiento generalizado en Francia de la llamada “Francia de la periferia”, donde se concentran las clases trabajadoras pero no el trabajo y donde el distanciamiento entre pobres y ricos ha ido creciendo desde la llegada de Macron.
De las noticias más actualizadas sobre el tema encontramos el artículo de El Mundo, donde se explica que hoy 10 de Diciembre de 2018 se celebra la firma del Pacto Mundial para las migraciones seguras: El Pacto de Marrakech.
En dicho pacto se da voz a los 480 millones de inmigrantes que se prevén para Europa, y los chalecos amarillos se han declarado totalmente en contra incriminando al presidente de la república por “vender Francia a la ONU”. Ante estos actos podemos ver un claro alzamiento de la extrema derecha tanto en Francia como en el resto del mundo como por ejemplo en EEUU y Hungría las cuales se han negado a firmar el documento de la ONU.
El movimiento de los chalecos amarillos es un movimiento mayormente anónimo, sin dirección, ni portavoces oficiales. Es un movimiento moderno, en que está organizado a través de internet sin un núcleo definido. A pesar de la falta de liderazgo oficial, podemos retrasar la influencia de ciertas figuras claves en la creación del movimiento.
Priscilla Ludosky, está reconocida como la cara más visible del movimiento quien creó la primera petición online contra el aumento de precios de gasolina. Ludosky, una vendedora de productos cosméticos y aromaterapia de la ciudad Savigny-le-Temple (a 40 Km de París) vio que sus gastos de gasolina se habían disparado de 45€ a 70€ mensualmente cuando decidió empezar su petición en el sitio web: “change.com”. Su petición fue firmada por más de 1.5 millones personas en unos pocos meses frente a otro aumento de 34 céntimos por Emmanuel Macron. Ludosky explicó que “El aumento de los impuestos en nombre de la transición ecológica es completamente hipócrita” cuando las conexiones entre ciudades suburbanas son casi inexistentes. El sentimiento de Ludosky está compartido entre ciudadanos de Francia rural y suburbano quienes componen la mayoría del movimiento.
Jacline Mourad, de la región Mobihan también está reconocida como uno de los ponentes claves en el movimiento de chalecos amarillos. Mourad subió un video en youtube denunciando el aumento de precios de gasolina y obtuvo más de seis millones de vistas. Mourad, madre de tres hijos es una cara reconocible del movimiento y de las luchas de la clase media.
Eric Drouet, uno de los líderes de los chalecos amarillos, está buscado por la policía francesa por “provocación a la comisión de un delito u ofensa “, y por “organización de una manifestación ilegal” de la manifestación que planeaba la ocupación del Elisée el pasado sábado 8 de diciembre.
Eric Drouet es un conductor de camiones pesados que se destacó desde el principio de las reclamaciones ya que siendo conductor, la aplicación de la nueva ley sobre las subidas del precio de la gasolina afectaría de manera significativa a sus ingresos.
La figura del señor Drouet se ha hecho famosa gracias a sus declaraciones como las siguientes: “Si vamos al Elysee, entramos. […] Este es el símbolo de este gobierno, así que sí, la gente quiere ir allí.”
Es por estas sentencias pronunciadas el miércoles por la noche, en el plató de BFMTV, que Eric Drouet es objeto de una investigación preliminar abierta por “provocación a la comisión de un delito”. Las investigaciones fueron encomendadas a la policía judicial de Versalles.
Uno de los líderes de la oposición francesa Jean Luc Mélenchon se posiciona y defiende la causa de los chalecos amarillos. “Nuestro objetivo no es recuperar, sino de ser recuperado, y tengo el honor de decirles que se ha hecho.” ha declarado Mélenchon al final del cuarto acto de movilización, convencido de que su programa está lo suficientemente cerca de las afirmaciones de los chalecos amarillos para ofrecerle un nuevo aliento después de semanas difíciles.
En contra en la provincia de Gironde el movimiento de los chalecos amarillos es importante pero “nadie quiere tomar la antorcha, ni la sombra en realidad”. Se han creado varios grupos en ciudades, sin que sea posible definir el número exacto de personas movilizadas para un departamento con 542 municipios.
Otra de las figuras que se podrían destacar es la del célebre cantante Francis Lalanne que desde 2017 es co-secretario de la Alianza Ecológica Independiente. Declaró en el Fígaro su intención de querer ser el representante de los Chalecos Amarillos en las elecciones europeas. “En nuestra opinión, la mejor respuesta al conflicto es el voto, la única salida, la única manera efectiva de salir del callejón sin salida. (…) El político entiende solo el equilibrio del poder político. Debemos pasar por las urnas y no por la violencia.”
Reuben Kessler, Esther Mula y William Okemba
10 de diciembre del 2018