Escrito por: Charles Rognon
El 24 de febrero de 2022 es un día histórico, durante el cual el presidente ruso ha empezado una invasión y una operación militar especial para desmilitarizar Ucrania.
Este acontecimiento ya tiene origen en la invasión de Crimea en 2014. A partir de este momento, Ucrania ha intentado tener buenas relaciones con occidente para integrarse en la UE y la OTAN, lo que ha creado una incertidumbre para Rusia. También, hay que tomar en cuenta que Putin quiere restaurar la grandeza de Rusia como en los días de la URSS, para que Moscú pueda controlar e influir en los países satélites.
Hoy en día, Ucrania está soportando bombardeos y ataques, con una población que debe huir y un ejército débil que necesita la ayuda de los países occidentales. Pero, el ejército ruso recibió la orden de ampliar la ofensiva y Putin anunció poner en marcha su fuerza de disuasión.
Esta intervención militar es una violación del derecho internacional y no es una guerra “justa”. En efecto, durante el siglo XIII, St Thomas de Aquino explica que una guerra debe ser justificada con un objetivo de restablecer la paz.
Sin embargo, en ningún momento Rusia ha respetado la soberanía de Ucrania y este concepto de guerra justa. Así, el casus belli de Rusia no ha sido justificado y aceptado por el sistema internacional. Para mostrar su rechazo, los Estados europeos han empezado a impartir sanciones económicas y financieras a Rusia, por ejemplo con la salida de los bancos rusos de la plataforma SWIFT para fragilizar la economía rusa. No obstante, la pregunta de hoy es hasta dónde pueden llegar las sanciones de los occidentales, sabiendo que Rusia es el principal exportador de gas y carbón en Europa.
Además, Zelenski, el presidente ucraniano, ha pedido entrar en la UE durante el pasado fin de semana para tener protección frente a los ataques. Ursula von der Leyen, la presidenta de la Comisión Europea, se ha mostrado favorable a esta proposición, lo que puede ser un nuevo acontecimiento importante en este conflicto.
Durante el fin de semana, China ha tenido entrevistas con Rusia, lo que ha podido dar una alianza en caso de ataque de los países occidentales. También, hay que tener en consideración que China es un mero observador, el cual está intentando anticipar los movimientos y opiniones de EEUU y de la UE. Así, podríamos esperar un ataque de China en Taiwán en los próximos días o semanas…
