El pasado 6 de marzo de 2019, el Real Instituto Elcano presentaba su libro Yihadismo y yihadistas en España: Quince años después del 11-M. El libro está producido por el Programa de Radicalización Violenta y Terrorismo Global (PRVTG), organismo perteneciente al Real Instituto Elcano, el think tank más importante de nuestro país. Con la elaboración del mismo los autores, Fernando Reinares, director del PRVTG, Carola García-Calvo, investigadora principal del PRVTG y Álvaro Vicente, investigador del PRVTG, ofrecen este estudio sobre el yihadismo global en nuestro país. Se trata de una investigación empírica, basada en datos sobre los yihadistas condenados o muertos en España entre 2004 y 2018, el año posterior a los atentados del 17-A en Barcelona, cuyo epílogo tuvo lugar en Cambrils a primera hora del día siguiente.
A la presentación en el Círculo de Bellas Artes acudió el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, así como los autores del libro Fernando Reinares, Carola-García Calvo y Álvaro Vicente. Tras una intervención del Ministro en el que alabó la actuación de las fuerzas y cuerpos de seguridad en materia antiterrorista el presidente del Real Instituto Elcano, Emilio Lamo de Espinosa dirigió un coloquio con los tres autores del texto para, finalmente, dar paso a una rueda de preguntas de la prensa y el público en general que decidió acudir al evento.
Según el autor, Fernando Reinares, con la elaboración de este libro pretenden “contribuir a una mejor concienciación social respecto al fenómeno y a la labor de nuestros servicios policiales y de inteligencia”. A lo largo del texto se han sistematizado e interpretado datos sobre 215 individuos (200 condenados en la Audiencia Nacional a lo largo del período que abarca el libro y 15 muertos en los atentados de Leganés y Cambrils al igual que en Alcanar y Subirats). El libro, según argumenta su investigadora principal, Carola García-Calvo “se subdivide en dos periodos según las fases recientes del yihadismo global: por una parte, los detenidos o fallecidos hasta 2011 y, por otra, los detenidos o fallecidos desde 2012”.
Yihadismo y yihadistas en España: Quince años después del 11-M se estructura en tres partes. La primera, dedicada a aspectos referidos a la mutación de las características sociales propias del yihadismo global en nuestro país. La segunda, centrada en una serie de factores que, a lo largo del tiempo, explican los procesos de radicalización yihadista. La tercera y última parte, acerca de las pautas observadas en la implicación individual y colectiva en actividades de terrorismo yihadista. Aunque el la obra se analiza información referida a más de 130 variables los autores, en la presentación, han destacado tres hallazgos:
En primer lugar, en España, los yihadistas dejaron ya de ser fundamentalmente inmigrantes de primera generación procedentes de países con poblaciones mayoritariamente musulmanas y buen especial de Marruecos, como ocurría hasta 2011. A partir de 2012, seis de cada diez yihadistas pertenecían a las segundas generaciones, es decir, eran descendientes de inmigrantes musulmanes pero, a diferencia de éstos últimos, habían nacido o crecido en España, al margen de que tuviesen o no la nacionalidad española.
En segundo lugar, tanto si los yihadistas se radicalizaron en España hasta 2011 como si lo hicieron desde 2012, son dos los factores que explican el proceso de radicalización en al menos siete de cada diez casos. Por una parte, la exposición, más cara a cara que online, a un agente de radicalización, por lo común alguien con trayectoria como activista o una figura religiosa. Por otra parte, la existencia de vínculos afectivos precios -basados en relaciones sociales de parentesco, amistad o vecindad- con algún yihadista.
Por último, entre los yihadistas condenados o muertos en España de 2004 a 2018, la pauta predominante fue implicarse en células o grupos y redes (CGR). Ahora bien, hasta 2011, nueve de cada diez optaron por actuar dentro del territorio español, donde residían, A partir de 2012, cinco de cada diez optaron por irse a una zona de conflicto, en especial como combatiente terrorista extranjero. Esto obedeció, sobre todo, al atractivo y a la accesibilidad del dominio que el autodenominado estado Islámico impuso en amplios territorios de Siria e Irak.
Aitor González Campos.