La esperada formación de gobierno en España no solo ha causado expectación y reacciones a nivel nacional sino que ha provocado una repercusión internacional histórica, pues que España ocupa ya el tercer puesto, por detrás de Bélgica y Camboya, de entre los países de la era democrática contemporánea que más tiempo han estado sin gobierno.

Por un lado, el francés Le Monde define a Rajoy como el gran superviviente del terremoto político español, mientras que en el New York Times se le cataloga como el caballo de guerra que deberá luchar contra una minoría conservadora y unos presupuestos generales con los que deberá hacer malabares.

«Le chef de l’exécutif espagnol a maintenu les ministres des finances, de l’économie et de l’emploi, qui ont piloté la reprise économique, et s’est défait de trois ministres controversés, ceux de l’intérieur, des affaires étrangères et de la défense.»

El jefe del Ejecutivo español ha apostado por los mismos ministros de finanzas, economía y empleo, responsables de la crisis económica española. Por otro lado, ha decido deshacerse de algunos más controvertidos como el de interior, exterior y defensa.

Además, en el periódico francés critican al jefe del ejecutivo, dejando entrever su cambios en los ministerios. Destacan que Mariano no ha cambiado a los ministros de finanzas, economía y empleo, a los que denomina como principales responsables de la crisis económica española. Es más, creen que uno siempre confía en un equipo que gana, que no ha habido ningún afán de rejuvenecimiento en sus filas y por lo tanto, pocas sorpresas ante el nuevo equipo de gobierno. También revelan que el ejecutivo no ha contado con gente joven en este nuevo equipo, sino que se ha optado por viejas glorias del partido, que ya cuentan con años de bagaje en el mundo de la política ya sea desde el escenario o las propias gradas.

En cambio, el periódico americano decide no mojarse tanto, por lo que Raphael Minder, analista americano reconocido, hace una clara referencia a la demora de 10 meses que ha sufrido España y a lo que le ha costado al PP conseguir esa «mayoría» en el Parlamento, todo ello a costa del PSOE, cuyo Secretario General terminó dimitiendo de sus filas y más tarde, de la propia Cámara.

«Mr. Sánchez did not rule out making another bid for the party’s leadership…he would travel in the coming week to “all the corners of Spain” to help rebuild the party. “I cannot let down the millions of Socialists who trusted in me and shared with me the path of saying that ‘no is no’ to Mariano Rajoy…”»

El Sr. Sánchez no descartó la opción de una nueva oferta al que era su partido para volverse a presentar como secretario general. Es más, ha prometido viajar a todos los rincones de España para reconstruir su partido y recuperar la confianza de los miles de españoles que como él, decían «no es no» a Mariano Rajoy.

No nos podemos olvidar de nuestros vecinos hispanohablantes, donde la distancia psicológica es menor y que, objetivamente, respaldan al gobierno español, algo que les beneficia, puesto que nuestros sistemas políticos deben entenderse a la fuerza, ya que son muchos los acuerdos arancelarios entre los países iberoamericanos.

Así pues, en los dos periódicos latinoamericanos consultados, el cubano Granma y el mejicano El Universal, se puede ver la referencia al fin de la parálisis política en nuestro país. Sin embargo, a ninguno de los dos se le ha escapado la abstención histórica del Partido Socialista Español, que finalmente no ha conseguido llegar a ningún acuerdo con su contiguo Podemos. Es más, no solo han perdido a su cabeza de filas, el voto de los socialistas más antiguos, sino también la confianza dentro de sus propios compañeros de equipo. El PSOE, en su ya conocido Comité Federal, había optado finalmente por la abstención en la investidura al candidato popular, pero 15 de los 83 diputados rompieron la disciplina de voto negándose en rotundo a esta investidura. La propia Susana Sumelzo, la que sería coordinadora del grupo de parlamentarios aragoneses en Madrid, también opto por el «no», algo que le llevó a perder su puesto. Sin embargo, el PSOE alega en su defensa que las normas del partido se respetan «voluntariamente» y que simplemente se le ha relevado de su puesto porque es lo que se hace en cada nueva legislatura. Al periódico tampoco se le escaparon las caras de decepción de los socialistas, sobre todo la de Antonio Hernando, portavoz del PSOE en el Congreso, al tener que darle la enhorabuena a su enemigo por antonomasia. También hace alusión a la falta de coherencia del PSOE quien permite al Partido Popular gobernar pero afirma en el pleno que no cuenta con su confianza.

A su vez, el periódico mejicano avanza algunas informaciones que descubren la nueva intención del partido popular ante la negativa de acuerdo por parte de los socialistas. El PP buscaría el apoyo del PSOE para poder gobernar en mayoría, si este no se lo cediese, la marea azul acecha con promulgar nuevas elecciones a sabiendas de que contarían con la mayoría absoluta y el PSOE quedaría relegado a tercera posición, perdiendo entonces su puesto en la actual oposición. Esto no sería más que una ardua lección de política realista del pleno siglo XXI.

Al contrario de lo que cabría esperar, la mayoría de críticas se las llevo el PSOE, especialmente desde Podemos. Este periódico asimismo critica que hubo una noticia que pasó prácticamente desapercibida, la dimisión de Pedro Sánchez. También el New York Times recogía esta información, puesto que el secretario general renunciaba a su acta de diputado fiel a su negativa a Rajoy.

El Universal reflejaba algo inaudito para la historia de España, la protesta de izquierdas que se desarrollaba en la calle, «Rodea el Congreso», alentada pues por algunos partidos de esta misma ideología. Además se afirma que algunos empresarios de derechas habrían ejercido su poder de influencia para impedir la coalición entre Podemos y el PSOE.

Sin embargo, aunque Ciudadanos no fue noticia puesto que sus intenciones estaban claras, el periódico mejicano tan solo recogía la declaración de Albert Rivera con su «este sábado al fin se pone en marcha España».

Como conclusión a la noticia, El Universal, como no podía ser de otra manera expresa que Peña Nieto ha felicitado a Rajoy y ha afirmado que las relaciones con España seguirán siendo muy cercanas.

Todos los periódicos coinciden en sus conclusiones, auguran un gobierno de derechas complicado, que deberá afrontar los compromisos de reducción del déficit exigido por la UE, el desafío secesionista de Cataluña y, además, gobernar en minoría, por no hablar de los actuales problemas a los que se enfrenta dentro de la comunidad internacional, como podría ser la crisis de refugiados que sufre Europa.

Ana Gadea Catalá

Alba Cascales López