La salida del Reino Unido de Europa, el llamado Brexit, no ha estado entre las máximas preocupaciones del británico medio en las pasadas elecciones. Sin embargo, los empresarios y la City londinense si lo tienen en el punto en el mira porque serían los más perjudicados; o lo analistas internacionales quienes consideran que la pérdida de influencia de Londres sería considerable. Los partidos políticos apenas se han pronunciado sobre el “Brexit” durante la campaña electoral. El partido Conservador y su lider David Cameron fueron quienes propusieron la celebración de un referéndum sobre la permanencia en Europa para 2017 en caso de ganar las elecciones. Sin embargo, en campaña no han hecho mención alguna alguna a la consulta. El que fuera su aliado de gobierno, el partido Liberal Demócrata solo sería partidario de la consulta en el caso de que se introdujeran cambios sustanciales en los tratados actuales que rigen a los 28 estados miembros. En la izquierda, el derrotado partido Laborista está a favor de permanecer en Europa pero con reformas. El otro gran vencedor en los comicios, el Partido Nacionalistas Escocés (SNP) de Nicola Sturgeon, también aboga por la permanencia en la UE. El UKIP de Nigel Farage es antieuropeo pese a que tanto él como su esposa viven del sueldo que les paga ese Parlamento Europeo que desearían ver vacio. En los programas políticos de los partidos británicos no ha habido grandes referencias a la UE. Y entre los dos grandes partidos no hay grandes diferencias. Los conservadores se comprometieron a celebrar la consulta y a negociar, previamente, un nuevo acuerdo del papel de Reino Unido en la UE. En ese pacto se buscaría proteger la posición británica en el mercado único frente a la eurozona, un papel más fuerte de los parlamentos nacionales a la hora de legislar en la UE y el retorno de poderes desde Bruselas a los Estados. Asimismo, Cameron propondrá la limitación del acceso de los inmigrantes al sistema de bienestar británico. En el lado laborista se habla de devolver a Londres un papel de liderazgo en una Unión Europea reformada, se descarta la entrada en el euro y se apoya el retorno de ciertos poderes de la UE a los parlamentos nacionales. En estos momentos, la pelota está sobre el tejado del primer ministro David Cameron. Su gobierno debe decidir cuándo se convoca el referéndum. Algunos ya apuntan a que se celebre lo antes posible porque la credibilidad de los gobiernos se desvanece a mitad de legislatura y cuanto más se retrase, más se puede desestabilizar la economía británica y la europea; al disuadir la inversión y dificultar la recuperación económica. Y 2017 es un mal año para contar con importantes concesiones, ya que se celebran elecciones en Francia y Alemania. El calendario más óptimo sería tener la renegociación con la UE cerrada para Navidad y convocar la consulta en otoño de 2016. La otra decisión que Cameron no debe demorar son las demandas que va a realizar a la UE. Unas propuestas que deberán ser realistas y razonables para el resto de socios. Se podría profundizar en el mercado único y quizás se puedan examinar maneras de restringir los beneficios pagados a los inmigrantes que llegan al Reino Unido, sin necesidad de cambiar los tratados. Su modificación abriría la caja de los truenos y requeriría de referenda en varios estados miembros, lo que impediría que la consulta ni siquiera se celebrase en 2017. Lo normal es que se llegue a una situación de compromiso favorable para ambas partes y dejar los cambios en los tratados para el futuro. Cameron no solo deberá convencer a todos los británicos de las bondades de la UE sino que también se tendrá que batir contra las huestes antieuropeístas de su partido. Ni al líder conservador ni al mundo de los negocios británico les interesa estar fuera de la UE. El Reino Unido es la quinta economía más grande del mundo. El 63 % de las 3.800 empresas del Reino Unido cree que el abando de la UE tendría un impacto negativo en la economía británica, según un encuesta de la BBC. A los empresarios europeos y estadounidenses les preocupa más un Reino Unido fuera de la UE que el abandono del euro por parte de Grecia. Hay que tener en cuenta que la salida de la UE costaría a Reino Unido un 2,2% del PIB, hasta 2030, según el think tank Open Europe. Además, a nivel interno un voto a favor de la permanencia del Reino Unido en la UE, acallaría la más que posible petición, tras los excelentes resultados cosechados por Sturgeon, de una nueva consulta sobre la independencia de Escocia. En el mundo globalizado actual el Reino Unido pierde peso a nivel internacional cada vez que se aleja de Europea. Su relación especial con los Estados Unidos cada día es más débil, no solo por sus recortes en defensa (de 102.000 a 82.000 militares y una Armada sin portaaviones en funcionamiento) sino también por esa pérdida de influencia en Europa. Un poder cada día menor en política exterior donde el peso del liderazgo negociador con la Rusia de Putin para pacificar Ucrania lo han llevado Alemania y Francia. Y a nivel económico la referencia para todos los líderes mundiales es Angela Merkel porque Reino Unido no está en la moneda única ni está representado en el Eurogrupo. Si Londres está dispuesta a pagar el precio de mantener relaciones con la UE, le exigirá participar en sus instituciones; y con Washington, le obligará a alinear su postura militar con Estados Unidos. Ese punto de equilibrio e influencia que el Reino Unido ha mantenido entre las dos orillas del Atlántico podría perderlo si finalmente se aleja de Bruselas, algo a que los británicos no parecen dispuestos a renunciar. Según la encuesta de Populus, el 39% de la población está a favor de dejar al UE frente al 40% con ganas de quedarse. Sin embargo, consuela saber que el 47% de los más jóvenes (entre 18 y 44 años) apostarían también por la unidad con Europa. La solución más favorable para los británicos es la que decía la canción: Ni contigo, ni sin ti.
Miguel Angel Benedicto. Twitter: @benedictosolson
Publicado en Nueva Tribuna. http://www.nuevatribuna.es/articulo/europa1/ni-contigo-ni-ti-ue-futuro-reino-unido/20150506121956115571.html