José María Peredo Pombo, Catedrático de Comunicación y Política Internacional. Universidad Europea de Madrid
Hace unos días andaba buscando el texto extraviado de mi defensa de acceso a la Cátedra de Comunicación y Política Internacional. Al poco pensé que mi amigo Gaspar Rosety seguro que lo guardaba. Me lo envió, íntegro, con el compromiso de compartir una cena para hablar de la universidad, de la Semana de la Comunicación, del periodismo y de la vida. Como tantas veces. Con Luis Móser y con distintos comensales. Pero en esta ocasión, no ha podido ser.
Aún sin estar sentados en una mesa de la universidad, sigo conversando con mi colega Gaspar Rosety. Recordando cómo se quitaba cualquier mérito de su trayectoria profesional a pesar de haber sido uno de los periodistas deportivos más importantes de nuestro país. Cómo se desprendía de cualquier elogio superficial. Cómo cautivaba a los estudiantes con su voz, su experiencia y con la mano maestra de su humanidad.
Sentado ahora como estoy en mi escritorio, con el maestro Gaspar Rosety al lado, en la paz de la amistad, quiero recordarle la inmensa fortuna que ha tenido nuestra facultad por haber sido ésta la universidad en la cual ha querido compartir su conocimiento con los estudiantes y formar a sus hijas en las áreas del Periodismo, la Comunicación Audiovisual y las Relaciones Internacionales.
Sentado en mí escritorio y acompañado por la voz de mi amigo Gaspar Rosety y por sus ríos de letras, de columnas y palabras, de manantiales y reflexiones, recupero un artículo publicado en La Razón. Se refería a mi modesto discurso, al deporte como instrumento de paz y a su universidad. Un gran hombre hace crecer a los demás.
Mandela, Peredo y la paz
Gaspar Rosety
Mientras Nelson Mandela se despide despacio de la vida, su existencia obliga a reflexionar sobre el valor que el Premio Nobel surafricano dio al deporte en su batalla por la paz y la superación del «apartheid». El deporte y el fútbol, en particular, pueden servir de forma impagable como medio pacificador. España y el mundo necesitan la paz y nosotros, desde los medios de comunicación o desde las aulas, contamos con esa enorme posibilidad de convertir la convivencia pacífica en un hábito que nadie pueda romper.
El prestigioso catedrático de Comunicación y Política Internacional de la Universidad Europea de Madrid, José María Peredo Pombo, doctor en Relaciones Internacionales y Periodismo, anotó este hecho en su brillantísimo cierre de la exposición de motivos para el acceso a cátedra: «Si pusiera mi palabra al servicio de una idea, de una forma de progreso, de un proyecto global, no sería otro que trabajar por la paz; conquistarla, defenderla y propiciarla».
Mandela, a quien personalmente admiro profundamente, utilizó el deporte, que Peredo Pombo sustituye ahora por la palabra. Ahora que España, con la Selección Nacional y sus grandes clubes, es embajadora mundial del fútbol, las posibilidades que disfrutamos de ofrecer al mundo una imagen de paz resultan maravillosas, también desde el periodismo. En una visión globalizadora, las relaciones internacionales forman parte sustantiva del periodismo y del deporte. El fútbol español debe dar ejemplo.
La palabra de Peredo Pombo encumbra la herencia de la idea de Nelson Mandela, Doctor Honoris Causa por la Universidad Europea 2010. El fútbol, el periodismo y las relaciones internacionales, unidos, deben ayudarnos a trabajar por la paz. Hagamos un esfuerzo.